Si ya has leído el libro de relatos Ojalá me ames (en caso contrario pincha aquí) y has quedado poderosamente atraíd@ por los personajes y la intrínseca realidad de sus respectivas historias, ahora puedes disfrutar de El don más codiciado del mundo, la primera novela de la saga.

Una historia profunda
En El don más codiciado del mundo Alma es una mujer aturdida, invadida por su historia, una mujer rota por el pasado. La opresión del ambiente en el que vive llena cada uno de los espacios, la atmósfera viciada la envuelve. La guía el amor, llevándola hasta personas oscuras por callejones sucios. La pasión la consume, y solo ve una luz pequeña a la salida del túnel. La enfermedad que muestra la muerte, y la búsqueda de la cura por cualquier medio, la arrastran hasta los bajos fondos de las ciudades y relaciones, siempre con las ansias de vida como bandera.
Sinopsis
Alma, poseedora de un increíble don, ve peligrar su vida. Gente muy poderosa la busca para utilizar sus habilidades en beneficio propio. Por eso decide desaparecer sin dejar rastro, no solo para salvarse ella, sino también para alejar el mal de sus seres queridos. Pero su familia no se resigna a perderla. Sin saber si está viva o muerta, pasan diez años tratando de encontrarla, con todas las precauciones, pues en la era digital, donde todos podemos ser espiados y controlados y el correo postal es susceptible de ser confiscado, temen revelar a los enemigos su paradero. Hasta que Carmen, la madre, idea un sistema de comunicación.
Conociendo la pasión de su hija por las novelas, encarga la escritura de la historia familiar utilizando el diario de Alma y los testimonios de familiares y amigos. El libro, que deciden titular “Si la muerte es la nada” tiene por tanto este propósito: enviar un mensaje a Alma.
Fragmento de la novela
«He escrito esta novela solo para encontrarte. Porque nadie sabe dónde estás. Hay quien dice que nos cuidas desde el más allá. Pero yo sé que estás viva. Perdóname por investigar tu vida, por entrevistar a familia y a amigos […] Perdóname por desvelar secretos, mentiras, engaños, por convertir en palabras los sentimientos, los tuyos, los míos, los de todos […] Esta novela es para ti, Alma, para que en ella puedas reconocerte, y reconocernos, en cada letra de cada página, por si llega a ti tan solo un fragmento o, por si en el caso de que nunca llegues a leerla, alguien algún día pueda contarte el argumento, y con ello, sin saberlo, te relate tu propia historia. Ojalá comprendas, por fin, que puedes regresar a casa.»